D.O. Rueda
Denominación de Origen Rueda: Tradición y Excelencia en Vinos Blancos
Historia y Evolución La D.O. Rueda, ubicada en la prestigiosa región de Castilla y León, es reconocida por su tradición vinícola que se remonta a la época medieval. Fundada oficialmente el 12 de enero de 1980, esta denominación fue la pionera en Castilla y León, destacándose por la protección y promoción de su uva autóctona, la Verdejo. Con una historia que comienza con el cultivo de la Verdejo por las tropas mozárabes, la D.O. Rueda ha evolucionado para incluir una notable producción de vinos tintos y rosados desde 2008.
Territorio y Clima El terruño de la D.O. Rueda es un altiplano de suaves relieves, elevándose entre 700 y 870 metros sobre el nivel del mar y caracterizado por un clima con inviernos fríos, primaveras con heladas tardías y veranos calurosos. Estos factores climáticos, junto a las terrazas aluviales del Duero y sus afluentes, crean el ambiente ideal para el cultivo de viñedos robustos que se extienden principalmente en La Seca, Rueda y Serrada.
Variedades de Uva y Vinos La especialidad de la D.O. Rueda son sus excepcionales vinos blancos, con la Verdejo como estandarte, reconocida por sus aromas herbáceos y su refrescante acidez. Además, la reglamentación ha abierto sus puertas a variedades tintas como Tempranillo y Syrah, y otras blancas como Sauvignon Blanc y Chardonnay, ampliando así su repertorio vinícola.
Bodegas Emblemáticas Las 72 bodegas que forman parte de la D.O. Rueda son custodias de su legado y calidad. Entre las más representativas encontramos:
- Bodegas Vatan y Bodegas Javier Ruiz, que se destacan por sus vinos con intensas notas frutales.
- Bodegas Castelo de Medina y Bodegas Copaboca, conocidas por su innovación y vinos de perfil moderno.
- Bodega Vicente Sanz y Bodega Muelas de Tordesillas, que combinan tradición y técnica para crear vinos de carácter único.
- Marqués de Cáceres, un nombre que evoca la excelencia y el prestigio en la viticultura de la región.
Estas bodegas, junto a otras en la región, son el corazón que late fuerte en la D.O. Rueda, cada una aportando su estilo distintivo a la amplia gama de vinos que hoy disfrutamos a nivel internacional. Su compromiso con la calidad y la tradición hace de cada botella un testimonio de su tierra y su gente.