Sopa Cremosa de Apio y Toque de Vino Blanco Exquisito
Introducción
La sopa de apio cremosa con vino blanco es una delicia culinaria que combina la frescura del apio con la complejidad del vino blanco. Perfecta para una cena elegante o como una reconfortante comida casera, esta sopa es una manera sofisticada de disfrutar de los sabores del apio. A continuación, descubre cómo incorporar el toque especial del vino blanco en una sopa cremosa que deleitará tus sentidos.
Ingredientes
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 cebolla mediana, picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 500 g de apio, cortado en cubos
- 2 patatas medianas, peladas y cortadas en cubos
- 1 hoja de laurel
- 1/2 taza de vino blanco seco
- 4 tazas de caldo de pollo o verduras
- 1 taza de crema de leche
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración
Paso 1: Preparar los ingredientes
Comienza por derretir la mantequilla en una olla grande a fuego medio. Añade la cebolla y el ajo, y sofríe hasta que estén translúcidos. Incorpora el apio y las patatas, y cocina durante unos 5 minutos, revolviendo ocasionalmente.
Paso 2: Añadir el vino blanco
Vierte el vino blanco y sube el fuego para que se evapore el alcohol. Deja que se cocine durante un par de minutos, luego añade la hoja de laurel y el caldo de pollo o verduras. Lleva la mezcla a ebullición, luego reduce el fuego y deja que se cocine a fuego lento durante unos 20 minutos o hasta que el apio y las patatas estén blandos.
Paso 3: Crear la textura cremosa
Retira la hoja de laurel y utiliza una licuadora de inmersión o una licuadora tradicional para purificar la sopa hasta que tenga una textura suave y cremosa. Regresa la sopa a la olla, si es necesario, y añade la crema de leche. Calienta la sopa a fuego lento, sin dejar que hierva, y sazona con sal y pimienta al gusto.
Paso 4: Servir
Sirve la sopa caliente, adornada con un poco de crema de leche y hierbas frescas si lo deseas. Disfruta de los sabores armoniosos que el vino blanco aporta a esta clásica sopa.
Variantes de la Sopa de Apio Cremosa con Vino Blanco
Para una versión vegetariana, utiliza caldo de verduras en lugar de caldo de pollo. Si deseas agregar una textura crujiente, incluye crutones de ajo caseros o semillas tostadas como topping. Para aquellos que prefieren una sopa sin lácteos, reemplaza la crema de leche por una alternativa vegetal como la crema de coco o la crema de soja.
Descubre cómo el vino blanco eleva esta sopa de apio a un nivel gourmet. ¡Una receta cremosa que no querrás perderte!